julio 19, 2023

Las ventajas del agua salada en tu piscina

Además de un considerable ahorro a la hora de comprar productos químicos y de limpieza, las piscinas de agua salada ofrecen una serie de beneficios, en especial ante la carencia de agua por falta de lluvias. Descubre junto a nosotros las ventajas del agua salada en tu piscina.

Si has decidido dar un paso al frente en este cambio para tu piscina, hay algunos aspectos que debes considerar antes. Uno de ellos es la diferencia entre el agua salada y el agua dulce en una piscina; a la segunda hay que agregarle cloro y de la primera se aprovecha la sal que contiene para generar cloro a través de un proceso de electrólisis. Luego, el cloro (hipoclorito) que se ha creado se descompondrá y se convertirá de nuevo en sal. Es lo que denominamos cloración salina.

Entonces, ¿puedo llenar mi piscina con agua de mar?

Sí, pero con algunas precauciones. Lo primero que debes comprobar es que el sistemas de cloración salina que vas a instalar esté preparado para procesar una salinidad tan alta. Debes asesorarte antes. Si la concentración de sal es alta como el agua marina, la reacción en el electrodo es más fuerte, lo que ocasiona un desgaste mayor y más rápido. Existen modelos que resisten la salinidad elevada, incluso del agua marina, que es de unos 35g/l. Sin embargo, la mayoría de equipos funcionan en un rango de entre 3 y 6g/l.

Por otro lado, ten en consideración que el agua de mar no está depurada, por lo que puede contener residuos, sales o metales que ocasionen daños a los cloradores.

Además, si optas por rellenar tu piscina regularmente con agua de mar, resultará más cuesta arriba prevenir las algas.

¿Qué tipo de sal debo añadir a la piscina?

Utiliza cloruro sódico (sal común) especial para piscinas. No se trata de la sal de mesa, que no es recomendable ya que contiene antiapelmazantes que causan daño a los cloradores salinos. Tampoco debes agragar sal de potasio (cloruro potásico). Por otra parte, si empleas sal yodada podría producir manchas en las juntas del gresite con el paso del tiempo.

Transforma tu piscina con la cloración salina

Para transformar una piscina tradicional en una de agua salada es imprescindible cambiar el sistema de filtrado incorporando un clorador salino, un dispositivo que como hemos comentado, genera cloro gaseoso mediante electrólisis a partir del agua salada. Este cloro después se disuelve en el agua y la desinfecta. Una vez que el agua pasa por sus electrodos y se convierte en hipoclorito sódico, éste se transforma de nuevo en sal. Se trata de un proceso natural, inofensivo para la salud y más respetuoso con el medio ambiente que ofrece muchísimos beneficios.

En piscinas con clorador salino, el pH suele subir un poco más rápido. Por lo que recomendamos que instales un regulador o controlador de pH. Si decides no instalarlo, deberás añadir productos químicos a mano con regularidad, tales como el reductor de pH, conocido como pHun ácido muy corrosivo.  Además de evitarte riesgos, el controlador mantiene el nivel de pH adecuado con precisión. Si lo hacemos manualmente, es posible que no agreguemos menos o más de la cuenta.

Encuentra más información aquí acerca de por qué usar un regulador automático de pH en tu piscina.

Una vez instalado el clorador salino, revisa antes que el agua de la piscina esté limpia y libre de algas. Comprueba también la temperatura. Alrededor de los 15 grados centígrados, puedes añadir entre 4 y 6 kilogramos de sal por cada metro cúbico de agua. O bien, 4 gramos y medio por litro de agua, aproximadamente. Normalmente el proceso de agregar la sal se lleva a cabo a inicio de la temporada de baño y solo debe hacerse una sola vez.

Ventajas de cambiar el agua de tu piscina por agua salada

  • Minimiza los riesgos a reacciones alérgicas a productos químicos. Al no usar productos químicos, las alergias e irritaciones, sobre todo en los ojos y la piel se reducen significativamente.
  • Fácil instalación. La electrólisis es muy fácil de instalar. No implica grandes obras en la piscina. Te recomendamos que dejes en manos de especialistas la instalación del clorador salino para obtener mejores y garantizados resultados.
  • Ahorro en productos químicos de mantenimiento. Con la instalación de un clorador salino, el agua salada regenerará automáticamente sus propios niveles de cloro. Las piscinas de agua salada no necesitan casi otros productos químicos para su adecuado mantenimiento. De vez en cuando, podrías agregar un protector de cloro para resguardar el cloro generado por electrólisis y así alargar la vida de la célula, al reducir la producción de esta sustancia. Añadir algüicidas o floculantes tampoco es necesario, a menos que observemos que el agua no se encuentra en condiciones óptimas.
  • Un sistema de desinfección más económico. Instalar un clorador salino implica una inversión inicial, sin embargo a medio plazo ahorrarás dinero. Esto tiene su razón de ser en que no tendrás que volver a comprar productos químicos para desinfectar el agua, lo que supone un ahorro de hasta el 80 % en el mantenimiento de la piscina. Por otra parte, aunque el clorador salino está conectado a la red eléctrica, su consumo es mínimo.
  • Mantenimiento más sencillo. Si el nivel de cloro es estable y su generación es automática, no necesitas añadir productos químicos. Esto hace que su mantenimiento se mucho más sencillo que en las piscinas convencionales. Lo que sí es importante es controlar el nivel de cloro y el pH del agua, pero puedes apoyarte con reguladores automáticos como hemos comentado anteriormente. Otro aspecto de interés es limpiar la célula del clorador cuando sea necesario.
  • Mayor disfrute. La concentración de sal en el agua es muy baja, es decir, es menor un 10% a la del mar. Por lo que el agua no daña la vegetación de la zona de la piscina, ni tampoco los materiales de revestimiento. Además, los baños son más cómodos y sin la sensación pegajosa del agua de mar. Por otra parte, en las piscinas de agua salada puedes bañarte cuando quieras, sin un horario de uso determinado, dado que no se agrega cloro ni sustancias químicas que perjudiquen la salud.

Este verano transforma tu piscina con la cloración salina. ¡Te asesoramos! Contáctanos al 954 35 69 39 o visítanos en la Calle Automoción, 27.